Una joya es portadora de recuerdos, emociones y significado personal.
Para mantener sus joyas de oro o platino de 18 quilates brillantes y hermosas, es importante cuidarlas bien.
A continuación le ofrecemos algunos consejos y sugerencias.
Inspección profesional
En Huis Vander Avort le recomendamos que haga revisar y limpiar profesionalmente sus joyas una vez al año.
Así comprobamos los engarces de las piedras preciosas para evitar que se caigan. Pulimos la superficie para devolverle su brillo original, o nuestro taller devuelve la joya a su estado original mateándola.
El platino y el oro de 18 quilates son excepcionalmente duraderos, pero incluso estos materiales requieren mantenimiento para garantizar que puedan disfrutarse durante generaciones.
Uso diario
Evite el contacto con los productos:
Las sustancias químicas fuertes como los productos de limpieza, el perfume o la laca para el pelo pueden dañar sus joyas. Por lo tanto, es mejor ponérselas cuando haya terminado de arreglarse.
El cloro de las piscinas afecta a las aleaciones de oro y puede debilitar el metal. Esto hace que las joyas de oro pierdan su brillo, se decoloren e incluso corran el riesgo de perder sus engastes. Por ello, le recomendamos que se quite siempre las joyas antes de nadar.
Tenga cuidado durante las actividades:
Al hacer ejercicio, trabajar en el jardín o realizar otras actividades intensivas (lavar los platos, limpiar y renovar), es mejor quitarse las joyas para evitar arañazos o daños.
Limpieza en el hogar
Limpieza de oro y platino: Utilice agua tibia con un jabón suave (como Dreft) y un cepillo suave (como un cepillo de dientes con cerdas suaves). Aclare abundantemente y seque con un secador de pelo.
Con cada compra, le proporcionamos paños especiales para pulir sus joyas. ¿No los ha recibido? Pídalos en su próxima visita.
Evite los materiales abrasivos: No utilice nunca pasta de dientes ni otros productos abrasivos, ya que pueden provocar arañazos.